No se trata de ser, sino de estar. No se trata de querer, sino de amar. Vivir es un verbo en gerundio, infinito, no infinitivo. Equivocarse es acertar y rendirse está prohibido. Lamentar es morir y aprender es una actitud. El futuro no existe y el pasado es borroso. El presente es auténtico y respirarlo una obligación. Los miedos son mentira y tu historia un ejemplo posible. Los amigos un tesoro, la familia un paraíso y tu alma todo corazón. Tu mente la herramienta, tus manos suficientes y tus labios de los besos.
Redefine tu mundo, las palabras y sus significados. Reinventa tu universo de intenciones y sentimientos. Habla de sensibilidades, de emociones y de superarse. Habla de silencios, de sonrisas y de estar al fin contigo. Mira el espejo y grita que otra vida es viable. Corre aún más lejos, insiste, persiste, siendo tu propio Dios, eligiendo, decidiendo, saltando y exprimiendo la existencia.
Conecta con la tierra, los animales y la naturaleza. Abraza la experiencia sin sospechas, el dolor sin huidas y la tentación sin culpas ni recelo. Que no hay pecado en ser humano, y que no hay juez que sea perfecto. Imagina sin límites y ya estarán desapareciendo. Acepta el destino justo antes de cambiarlo. Perdona aún sin mediar disculpa y ya estarás siendo libre. Que la necesidad te encadena y depender es la muerte.
Dibuja de nuevo tus letras, con la forma más bella, pintando cada movimiento genial de tu cuerpo con esmero, con meditación y con arrebato. Iluminando las sombras son acciones y el invierno con primaveras. Seduciendo los instantes y soñando lo imposible. Con dedicación, empeño, obstinación y entusiasmo. Llevando la lógica al delirio y la lógica al engaño. Portando el orgullo de aquellos que lo intentaron. Con fe desmedida y sin medida razonable.
La pasión de crear desde cero. Los versos, mil poemas, la prosa, las historias, los cuentos y tus hazañas. Arder recitando verdades que nunca se dijeron y que ahora empiezan, como empieza lo bueno. Dejar volar las ganas y alcanzar el horizonte incluso antes de que aparezca. Sin dar tiempo a la duda. Luchando cada paso por un camino tan efímero como bello que nos lleva al mismísimo centro de todas las cosas…