La filosofía es clara. Se trata de no dejar de hacer cosas. No importa demasiado si al principio las haces mal, tampoco si aciertas o no obtienes el éxito esperado. Es lo de menos. Lo importante es iniciar proyectos y llevarlos al papel, pues en tu cabeza no sirven de nada. Da igual a lo que te dediques y te refieras. No importa si hablamos de negocios o de cotidiana existencia, de relaciones personales o profesionales. Haz cosas por encima incluso de tus posibilidades, y que eso nunca termine.

Escribe tus objetivos en una pizarra, da pasos en cualquier dirección, pero los tienes que dar. Interrumpe lo que se espera, fuera o dentro de tu mente. Rompe las expectativas y salta de verdad al mundo. Arriegarse es tomar las riendas de la vida. Es decir basta a la quietud y a lo estático y respirar las verdades del camino. No vale con quedarse parado sin moverse, pues la genialidad surge de la equivocación constante, jamás del acierto del instante.

Mucha gente me pide recetas para ser feliz. Te daré una, pero sólo te permito criticarla si la llevas a cabo durante un mes seguido. Es lo menos que puedo pedirte.

Levántate antes que salga el Sol, sal a las calles de la ciudad, aún dormida, y trota con buena música en los oídos. Observarás amanecer, de esos placeres que nos privamos por ponernos excusas. Llega a casa y date una buena ducha, sintiendo la espuma resbalar por tu cuerpo y esa sensación agradable de vapor y olor a limpio. Elige minuciosamente la ropa que usarás, quiero tu mejor versión. Si trabajas, sal con tu mejor sonrisa, si no, lo mismo. Dedica unos minutos a dar los buenos días a quienes no se lo esperan. Escribe unas palabras para alguien que lo merezca. Busca ilusionarte con retos, deportivos, profesionales, personales, etc. La existencia adquiere color cuando uno sabe por lo que lucha. Canta, baila, haz chistes de ti. Elige comer sano, nada de grasas, ni comida rápida, ni bollería, pues es la gasolina para tu cuerpo. Abre un blog, señala el calendario con los próximos cumpleaños y ve pensando lo que vas a regalar a cada persona, teniendo en cuenta que no todo lo que gusta vale dinero, también tiempo. Aprende a cocinar, ve películas que animen el alma, videos que motiven y lecturas que te hagan reflexionar. Olvídate un tiempo de la política, del Euribor y la prima de riesgo, no sirven de nada. Consume productos saludables en todos los sentidos. Medita, haz algún favor a alguien, asiste a escuchar gente que hayan decidido tirar adelante. Ve atardecer mientras andas por algún camino amable. Di en alto lo que quieres, no te creas el inconsciente que sabotea, ni convenzas aquellos que creen que estás loco.

Haz todo eso y ya me cuentas, sin excusas, sin ser esquivo a las premisas. Te garantizo que empezarás a sentirte inspirado, y eso te llevará a hacer cosas geniales. Los genios son aquellos dispuestos a serlo, y para eso toca parecerlo desde primera hora. La mayor locura es ser supuestamente cuerdos todo el tiempo, suspirar de aburrimiento y creernos que eso es una vida sensata y correcta, cuando yo pienso que eso es hacerse el muerto…