Uncategorized

Relato Corto de mi Hermano Rafa

Hoy conocí a un amigo muy interesante, me sorprendió cuando se presentó, no lo esperaba, apareció cuando corría por el parque, me saludó como si le conociese de toda la vida, me invitó a sentarme en un banco con el pretexto de hablar un poco.

-Hermoso día, hoy me encuentro con ganas de repartir alegrías y ser compasivo ¿qué planes tienes para hoy?- Su pregunta me dejo bastante atónito.

-Correr un poco, ir al negocio, hacerme un poco más rico- le dije en forma de broma.

-¿Crees que ha merecido la pena? ¿Crees que has elegido el camino correcto cuando no cogiste aquel tren hace unos años?- Su mirada desafiante se clavaba en mis pupilas, había algo escalofriante en aquella mirada.

-¿Quién te crees, sabes quién soy? No me conoces de nada y vienes aquí a cuestionar mi vida- Aunque mis palabras sonaban duras no parecía prestarme atención.

-Al sur está tu espléndido negocio, envidia de necios, donde puedes seguir ganando dinero, donde se encuentra tu soledad y tiranía pero al norte está tu hijo, tu ex mujer y el resto de tu familia abandonada, quizás es un buen día para cambiar de rumbo.

-¿Quién te crees que eres, Dios?-Me levanté enfadado, con rumbo hacia el sur, intentando olvidar aquel individuo que cuestionaba mi vida de forma gratuita, mientras me coloque de nuevo los auriculares para escuchar música crucé la carretera que daba a mi negocio, lo siguiente que recuerdo es estar tendido en el suelo encharcado en sangre, con dolor en cada rincón de mi cuerpo, pidiendo auxilio a voces, de pronto sentí una mano en mi hombro, allí estaba otra vez aquel individuo.

-Te dije que hoy estaba compasivo, pero una vez mas no escuchaste, no has escuchado nunca en tu vida, has provocado daño sin importante lo más mínimo, tu dinero fue tu ruina, pero te vas como se van todos, con una diferencia, tú ni corazón te llevas, amigo siento decirte que no soy dios, solo soy… la muerte.

Deja un comentario