Viento en popa a toda vela, no roza el mar sino vuela… La mejor de las recompensas es acostarte con la conciencia tranquila de haber dado hasta la última gota de sangre y sudor en este día mustio, por pocos aplausos que gasten a su alrededor…
Enrique Vazquez Oria
Blog del Psicólogo, escritor y locutor. Aún confío en una Psicología Artesanal…